Nadella le sigue a Steve Ballmer, quien anunció su renuncia a la posición el pasado agosto. Ha señalado que desea romper con el patrón de la compañía. La mayoría de su experiencia es en servir a los clientes corporales, los cuales componen dos tercios de los beneficios de Microsoft. Nadella ha sido líder en los esfuerzos de Microsoft para alquilar potencia de cálculo a otras empresas.
En un comunicado difundido por Microsoft, Nadella expresó su satisfacción por este nuevo puesto y detalló que esta es una gran oportunidad para continuar transformando a la compañía. Un reto para el que se está preparado para dominar es el de acelerar la capacidad de introducir productos a los clientes con mayor rapidez.